viernes, 8 de marzo de 2019

INCORPORAR HERRAMIENTAS A LA INFORMACIÓN O SUCUMBIR EN LA BRECHA DIGITAL





Resultado de imagen de REDES SOCIALES


Todo el mundo conoce Facebook (todo un espejo para algunas personas que deciden contarlo todo, todo, todo), Twitter (para estar al día en minutos , llendo al grano y sin rodeos), Instagram (para verlo mejor que leerlo), Whatssapp (he tenido que mirar cómo se escribe), Youtube (si unes ver y oir te acercas más a las sensaciones de vivencias), Flickr (las imágenes se ordenan en galerías para tematizar eventos), Trello (me lo apunto para recordarlo luego), Pinterest (entre pines y pines puedes ver la vida) y otras herramientas menos conocidas como Scoop it, Calamêo, ....

Resultado de imagen de SCOOP IT
Resultado de imagen de CALAMEO

Cada vez más, las administraciones públicas se hacen con más herramientas de redes sociales que potencian el lanzamiento de comunicaciones a la ciudadanía. Prácticamente todas las administraciones por pequeñas que sean utilizan alguna de ellas. Se convierten en canales elegibles por la persona usuaria que, cada vez con mayor comodidad acceden a algún trámite o información de su administración local (por cercanía) o autonómica o estatal.

Resultado de imagen de WHATSAPP


Hace poco leí que un ayuntamiento tenía entre sus redes sociales el uso de Whatssapp para establecer un canal de comunicación unidireccional (ahora la app permite crear grupos en los que solo puedan escribir los administradores, no quiero imaginar el error que supondría dejar el grupo con participación abierta a todos los integrantes), de esta manera cualquier comunicación que desee el ayuntamiento lanzar a la ciudadanía les llega a aquellas personas que solicitan su inclusión en el grupo. Es un medio tan cercano que tiene un uso muy frecuente y un gran número de usuarios (800 millones en el mundo). Otros ayuntamientos u organismos hacen un uso de Whatssapp a través de la herramienta de lista de difusión que ofrece la aplicación (reciben el mensaje si alguien lo envía al número corporativo pero no es leído por el resto de usuarios agregados a los contactos).

Tras leer a Borja Colón de Carvajal (premio nacional de innovación 2019), al cual leo en muchos temas de innovación, me he percatado del re-descubrimiento de Telegram, una aplicación paralela a Whassapp que permite crear canales de difusión en los que el administrador escribe y difunde pero el resto de los suscriptores no pueden escribir, tan solo leer y descargar los enlaces difundidos. Genial, no se convierte en un patio de vecinos ( que es un sitio donde no modera nadie y todos hablan cuando les motiva el corrillo, a la vez y sin orden).

Resultado de imagen de telegram


Telegram permite crear canales de difusión en los que los usuarios se inscriben y se dan de baja ellos mismos en cualquier momento, no aparece información de los miembros y es imposible comunicarse con ellos, es un canal totalmente unidireccional. Se descarga desde cualquier store a cualquier dispositivo; tiene versión web, por lo que la gestión de administración y difusión es muy cómoda. Los mensajes están altamente protegidos por su cifrado y pueden autodestruirse. Su velocidad testada es mayor que otras apps Es gratis para siempre y sin anuncios, puede tener hasta 200.000 miembros en grupos privados, en públicos no hay límite, sincroniza con otros dispositivos, envía documentos de cualquier tipo. Telegram es una aplicación de mensajería móvil y de escritorio basada en la nube que se centra en la seguridad y la velocidad.

Tal como nos dijo Amalia López Acera : Aquellos que están tan locos como para pensar que pueden cambiar las administraciones públicas, son aquellos que lo hacen. Parafraseando a Steve Jobs que hablaba de cambiar el mundo.

Yo tengo ya mi canal de telegram: CANAL DE TELEGRAM (comenzando pasito a pasito y diversificando el aprendizaje)